RESEÑA | LOS RENGLONES TORCIDOS DE DIOS

 

Los renglones torcidos de Dios narra la historia de Alice Gould, en Madrid de la época de los 80, dónde es ingresada voluntariamente en un sanatorio mental. Asegura ser una investigadora profesional por lo que el motivo de su ingreso es investigar la muerte del hijo de uno de los médicos de aquel lugar, un caso bastante peculiar. Sin embargo, según una carta de su médico particular, la realidad es completamente distinta. El verdadero motivo de internarse en aquel sanatorio es por su paranoica obsesión, la de atentar contra la vida de su marido Heliodoro Almenara. Nuestra protagonista tiene una extrema inteligencia que jugará en su favor para despistar a los médicos y residentes del lugar, creando bastante confusión en si de verdad la han ingresado injustamente o si de verdad padece un grave y peligroso trastorno psicológico.

Por otro lado, el doctor César Arellano se convertirá en el mayor defensor de nuestra protagonista y por tanto de la buena salud mental de la misma. Su misión en este caso será descubrir el secreto que esconde la paciente para así demostrar que realmente está sana. Pero la veracidad de los delirios que Alice experimentará en el sanatorio harán que ella misma se contradiga, creando así una confusión mayor tanto para los profesionales como para ella misma. Sin embargo, hay quien piensa firmemente que Alice Gould está realmente loca, y ese es el director del centro mental Samuel Alvar. Por lo que se desencadenará una verdadera trifulca entre el bando de los que creen a ciencia cierta que nuestra protagonista está mal de la cabeza y los que saben que es una tapadera y está en su sano juicio mental.

OPINIÓN PERSONAL :

La verdad que no suelo leer muchas historias de este género, pero me lo han recomendado tantas veces que decidí darle una oportunidad. Ha sido una lectura lenta y me ha costado coger carrerilla a la hora de leerlo, ya que la trama contiene muchas subtramas, unas más interesantes y otras menos, unas más sencillas y otras más enrevesadas, pero al fin y al cabo tiene algo que te deja pensando sobre la historia. El hecho de que el autor escribiera este libro tras haber sido internado en un manicomio y así sentir de primera mano lo que sienten los que residen allí me parece un punto muy importante a destacar, además de la valentía de Torcuato de entrar en aquel lugar lleno de locura y delirios. La verdad que no es un libro fácil de leer, y la confusión que creaba la protagonista a la hora de saber si de verdad estaba sana o loca creaba mucha intriga y tensión durante la lectura. En definitiva, ha sido una lectura poco común en comparación con los géneros que suelo leer normalmente pero que recomiendo leer una vez en la vida para experimentar sensaciones nuevas y diferentes.

La historia narra sobre la vida de Alice Gould, una mujer que voluntariamente decide ingresar en un sanatorio en la época de los ochenta en Madrid. Su estancia allí tiene un motivo y es la investigación de la muerte del hijo de uno de los médicos de aquel lugar. Sin embargo, su médico particular escribió una carta relatando el verdadero motivo de su internamiento: una paranoica obsesión, la de atentar contra su marido en varias ocasiones por envenenamiento. Aún así, nuestra protagonista confundirá a todo el mundo con su gran inteligencia, entre ellos al doctor César Arellano y al director del centro Samuel Alvar, y no sabrán a ciencia cierta si de verdad está en sus cabales o ha perdido la cabeza del todo. La trama es lenta pero nos va adentrando en los entresijos de la historia. Los personajes me han resultado algunos más pintorescos y otros más desagradables, y no es para menos, ya que la trama se desentraña en un sanatorio mental. Los últimos capítulos y desenlace final te dejan en vilo hasta descubrir todo el pastel y saber qué va a ser de Alice Gould.

Los personajes han sido un punto muy importante en la historia. Tenemos a nuestra protagonista femenina Alice Gould. Ha sido una verdadera locura de personaje ya que tiene una capacidad inmensa de confundir a todo el mundo y hacer creer lo que ella quiere que crean. Además, sabe cómo conducir y reconducir cualquier situación que pueda perjudicarla o beneficiarla. Es uno de los personajes más complejos y difíciles de digerir que he leído hasta ahora. Ha creado mucha expectación en mí como lectora ya que no sabía qué creer hasta el final de la novela que es dónde se desvela todo.

También quiero hablaros de Samuel Alvar, el director del sanatorio mental. Este individuo no ha sido santo de mi devoción, ha hecho todo lo posible para que la estancia de Alice fuera la peor de todas, sin importar nada más. Ha sido un personaje bastante cruel a la hora de llevar a cabo castigos, y el hecho de que fuera el único que creía que nuestra protagonista estaba realmente loca daba mucho de lo que pensar. Sin embargo, creo que ha sido un buen villano, por así decirlo, ha conseguido que la trama sea mucho más intensa en ciertas partes y enganchara al lector. Creo que es de esos personajes que no esperas que sean de esa manera y finalmente terminan sorprendiéndote.

La pluma de Torcuato Luca de Tena ha sido sublime. El simple hecho de saber que el propio escritor fue a un sanatorio para conocer todos los entresijos de lo que se esconde en un sitio como ese es de admirar. No creo que todos los escritores fueran capaces de hacer ese tipo de cosas para documentarse y sentir de primera mano todo lo que acontece en ese ambiente. Por eso mismo creo que la novela se siente mucho más real en ese sentido, ya que aunque sean personajes e historias ficticias, tienen algo realista al fin y al cabo. Por lo que el trabajo que ha hecho Torcuato es para aplaudirle.

En conclusión, Los renglones torcidos de Dios, una historia autoconclusiva escrita por Torcuato Luca de Tena. La premisa de esta novela es ficción pero tiene algo realista si te paras a pensarlo. Nos relata la historia de Alice Gould, una mujer que decide voluntariamente ingresar en un sanatorio mental. Al principio puede parecer que su estancia allí es por algo en concreto, pero el verdadero motivo de su internamiento es otro. La trama es lenta de leer, pero necesaria para ir entendiendo todos los entresijos que guarda esta historia, y conocer de primera mano lo que pueden llegar a sentir los pacientes. Los últimos capítulos y desenlace son una verdadera montaña rusa, ya que hasta el último momento no sabemos si su protagonista está en sus cabales o ha perdido la cabeza de verdad, por lo nos mantiene en constante confusión hasta la última página. No es el género que suelo leer pero es necesario leer un libro del estilo al menos una vez en la vida y saber qué se siente.

¿Qué os parece el mensaje que guarda este libro?

¿Os ha gustado la personalidad de su protagonista?

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