RESEÑA | LA OTRA CARA DE LA PERFECCIÓN

 

La otra cara de la perfección narra sobre la vida de Alina Keeler, una joven destinada a convertirse en una bailarina profesional en el mundo del ballet. Toda su vida ha girado en torno a esta especialidad, es el eje de su universo, su mayor sueño, por lo que lleva mucho tiempo trabajando muy duro para llegar a su meta. Pero todo empieza a torcerse tras una terrible lesión que la obliga a apartarse del ballet, y con ello todos sus sueños se esfuman de golpe y porrazo. Aunque no pierde la esperanza de volver a hacer ballet. Tras el verano recuperándose todo lo posible, no le queda otra opción que empezar el nuevo curso en un instituto convencional donde el ballet casi ni se nombra. La fuerza que tenía para volver a su anterior rutina van disminuyendo tras aceptar la realidad, y empieza a ser consciente de que el mundo del ballet había terminado para ella.

Aún así, el hecho de adentrarse en los ensayos del musical del instituto ha sido mejor de lo que ella esperaba gracias a Jude, su compañero de reparto, vecino y posiblemente el mejor apoyo que va a tener de ahora en adelante, porque inevitablemente es de esas personas que la escuchan e intentan comprender su situación sin prejuicios. Hasta ahora no había reparado en él pero empezará a centrarse en esta nueva alianza junto con otros nuevos amigos como Ethan y Margot, y empezará a vivir la vida que el ballet llegó a quitarle debido al trabajo duro y la presión por destacar y ser la mejor para que la admitieran en la mejor academia. A pesar de seguir sintiéndose rota por dentro y de no encajar en el lugar en el que está, Alina tiene todo el tiempo necesario para evolucionar y cambiar esas zonas oscuras que mantiene guardadas en su interior.

OPINIÓN PERSONAL :

Tenía muchas ganas de leer una historia rápida de adolescentes con romance y pensé que con esta novela había acertado. Pero no ha sido el caso en absoluto, y realmente me da mucha pena porque la premisa prometía ser muy interesante. El hecho de haber tanta información y tecnicismos sobre todo lo que tiene que ver con el mundo del ballet me sacaban completamente de la historia, ya que al desconocer esta danza me desubicaba por completo. Que la autora te enseñe algunas cosas sobre este arte lo veo bien, pero de ahí a que en todos y cada uno de los capítulos estén con el mismo tema me estaba resultando aburrido y monótono. Otro punto negativo, su protagonista. Creo que hacía mucho tiempo que no leía a un personaje principal tan insufrible como Alina Keeler, y me da bastante pena por lo que ya dije anteriormente, pero su actitud y mente cerrada, el mal trato que tenía con todo el mundo incluyendo a su familia, me parecía excesivo. Por lo que no he llegado a congeniar y mucho menos identificarme con ella. Por lo demás, es una historia de adolescentes para pasar el rato, con personajes secundarios que ofrecen mucho más que su propia protagonista y con un desenlace muy predecible y precipitado.

La historia narra sobre la vida de Alina Keeler, una joven que se desvive por el ballet y todo lo relacionado con esta danza. Ha dedicado gran parte de su vida a perfeccionar sus técnicas para ser de las mejores y así conseguir entrar en la academia más prestigiosa. Pero todo se tuerce en el momento de una terrible caída, lo que la obliga a dejar de bailar. Su vida va a cambiar de manera brusca en el momento de empezar el curso en un instituto convencional que no se dedica al ballet. Conocerá a varios amigos dentro del musical que la harán sentirse lo mejor posible, pero ella siente que no es suficiente y prefiere encerrarse en sí misma y con ello no salir de su habitación. La trama nos la muestran bastante sencilla, con una protagonista que deja mucho que desear debido a su mala actitud, pero los personajes secundarios tienen mucha más carisma y salvan un poco la historia. Aún así, en los últimos capítulos, Alina intenta reparar todo el daño que ha ocasionado de forma frenética y poco creíble, ya que toda persona necesita su tiempo para reflexionar y con ello cambiar su actitud ante los demás. Y el final es muy precipitado y predecible, por lo que me ha parecido una novela monótona y sin sorpresas.

Sobre los personajes quiero hablaros de Jude, el protagonista masculino. Aunque no haya tenido tanto protagonismo como en el caso de Alina, ha aportado mil cosas más a la trama. Empatizas con él, te sientes identificada por lo que va transmitiendo en la trama y no puedes evitar sentir aprecio por todos los actos de bondad y amor que hace sin pensarlo dos veces, ya que le sale solo y desde el corazón. Aunque es cierto que al principio querían encasillarlo en el papel de chico malo y reservado, pero menos mal que ha ido cambiando ese rol porque este le pega mucho más a este tipo de historia.

También quiero hablaros de Margot, otro de los personajes secundarios y amiga de nuestra protagonista. Margot despierta tan buenas vibras y te motivan tanto hasta el punto de querer conseguir todo lo que te propongas, hasta comerte el mundo si es necesario. Es de esas amigas que también tiene sus fallos pero no los camufla en el momento en que se lo transmiten para que no siga por ese camino. Y también es de esos personajes que allá donde vaya, la alegría y la diversión están aseguradas.

La pluma de Mariko Turk me ha decepcionado bastante. Esperaba muchísimo más de su narrativa, en más de una ocasión sentía que estaba leyendo un libro sobre técnicas del ballet. En el tema de su protagonista tampoco ha acertado del todo ya que en mi caso no he conseguido entender su manera de ser y tratar a los demás. Creo que la autora ha querido arreglar ese error casi al final de la novela, pero habría estado mucho mejor si no hubiera tenido que arreglar nada deprisa y corriendo y hubiera creado la actitud de su protagonista de otra manera. En cambio, los personajes secundarios han salvado la trama de un rotundo fracaso para mí, ya que si no hubieran estado seguramente habría abandonado este libro.

En conclusión, La otra cara de la perfección, una historia autoconclusiva escrita por Mariko Turk. Esta historia nos cuenta sobre la vida de Alina Keeler, una joven destinada a ser bailarina profesional de ballet. Pero un fatídico accidente hizo que su sueño se rompiera en mil pedazos. Ahora debe enfrentarse a su nueva vida lejos del ballet, por lo que deberá empezar de cero en un nuevo instituto, con nuevos compañeros y nuevas extraescolares como el musical escolar. Por otro lado, Jude, nuestro protagonista masculino nos mostrará su lado más duro y reservado, pero conforme vaya conociendo a Alina, empezará a abrir su coraza y por tanto su alma. La trama ha sido entretenida de leer a pesar de haber exceso de tecnicismos sobre el ballet y obras de teatro que desconocía hasta ahora. En más de una ocasión me sacaba de la trama. Otro punto negativo ha sido la actitud de su protagonista con respecto a todo el mundo que la rodea, los trata de la peor manera y no hace nada por arreglar el problema, prefiere encerrarse en sí misma y no salir de su cuarto. Aunque casi al final de la novela eso empieza a cambiar de manera un tanto brusca y poco creíble, ya que las personas necesitamos un tiempo estimado para procesar nuestros errores y llegar a realizar un cambio. El final muy predecible y sin más.

Muchas gracias a Puck por el envío del ejemplar.

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